Censura militar: rocas del espacio en camino a la Tierra ahora son confidenciales

Leonard David
SPACE.com / Sott.net
Traducción al español por el equipo de SDLT
10/06/09

¿Cuál bola de fuego? Aquí no hay nada que ver, amigos,
sólo sigan en lo suyo, por favor.


Durante quince años, los científicos se han beneficiado de la información recabada de los satélites clasificados de Estados Unidos sobre eventos naturales relacionados con bolas de fuego en la atmósfera terrestre, pero ya no más.

Una reciente medida interna tomada por el ejército de EE.UU. declara explícitamente que las observaciones de bólidos entrantes y bolas de fuego realizadas desde los vehículos espaciales confidenciales del gobierno, son un secreto clasificado y no serán publicadas, según dio a conocer SPACE.com.

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Los principales objetivos de los satélites incluyen la detección de ensayos de bombas nucleares, y el reconocimiento de asteroides y meteoroides más pequeños cuando explotan al atravesar la atmósfera ha sido un subproducto con información de suma utilidad para los científicos.

En pocas palabras: Las rocas espaciales que explotan en la atmósfera ahora son información clasificada.

“Nos desconcierta este cambio tan repentino,” dijo un científico familiarizado con este trabajo. “Es una desgracia porque hasta ahora ha existido una gran sinergia… un muy buen acuerdo cooperativo. Los sistemas se programaban en el modo de uso-dual gracias al cual se podía realizar una gran labor científica que no habría sido posible de otra manera. Es un cambio lamentable de medidas políticas."

Los científicos afirman que no sólo se verán obstaculizadas las investigaciones sobre las amenazas del espacio, sino que también disminuirá la comprensión pública sobre las explosiones a menudo dramáticas en el cielo, lo cual podría conducir a un estado de histeria y miedo ante lo desconocido.

¡Aquí vienen!

La mayoría de las “estrellas fugaces” son provocadas por basura espacial natural no más grande que un frijol. Pero habitualmente, rocas del tamaño de pelotas de básquetbol e incluso del tamaño de autos pequeños impactan en la atmosfera. La mayoría se evapora o explota al atravesar la atmósfera, pero algunas alcanzan la superficie o explotan sobre ésta. Naturalmente, los científicos desean saber más acerca de estos eventos para poder predecir mejor el riesgo que presentan aquí en la Tierra.

Sin embargo, debido a que el planeta está compuesto por dos tercios de océano, la mayoría de los objetos entrantes no son visibles para los observadores situados sobre tierra firme. Muchas otras rocas espaciales entrantes pasan desapercibidas debido a que la luz del día las tapa.

En aproximadamente la última década, cientos de estos eventos han sido avistados por los satélites clasificados. Muchos datos de inmenso valor obtenidos de la observación por vehículos espaciales fueron puestos rápidamente a disposición, suministrando a los investigadores información sobre el tiempo, la localización y la altitud de estos objetos, así como las curvas de luz (gráfica que muestra la variación del brillo de un objeto celestial durante un periodo de tiempo determinado) para ayudar a identificar con exactitud la cantidad de energía producida por las bolas de fuego.

Y en el mundo inestable en el que vivimos hoy día, es bueno saber que una detonación en los cielos es natural, contrariamente al estallido de un arma nuclear.

Allí donde el valor de la vigilancia espacial realmente se hace notar más es sobre las superficies remotas del océano, lejos de la recolección de datos que puede obtenerse sobre tierra firme.

Pero todo esto terminó en estos últimos meses, dejando sorprendidos y disgustados a los científicos ante el cambio de políticas. Aún se espera que esta medida sea reconsiderada y que se acabe por anularla.

Importancia crítica

“La información sobre las bolas de fuego obtenida mediante los recursos militares o de vigilancia ha sido de una importancia crítica para evaluar el peligro de un impacto,” dijo David Morrison, un científico especializado en Objetos Próximos a la Tierra (NEO, por sus siglas en inglés) del Centro de Investigación Ames de la NASA. Recalcó que su opinión es personal, y no en condición de portavoz de la NASA.

El tamaño promedio del impacto atmosférico más grande de asteroides pequeños es un elemento clave de información experimental para anclar el límite de energía mínima de la distribución de la ley potencial de los objetos que impactan, desde asteroides mayores a 10 kilómetros de diámetro hasta menores en la escala métrica, según explicó Morrison a SPACE.com

“Esta información sobre las bolas de fuego junto con las observaciones astronómicas de asteroides más grandes próximos a la Tierra, definen la naturaleza del peligro de impacto y permiten planear en forma racional la manera de tratar este problema,” dijo Morrison.

Morrison mencionó que la información sobre las bolas de fuego desempeña actualmente papeles adicionales importantes.

Por ejemplo, la información sobre bolas de fuego aunada al uso de ondas infra-sónicas permitió a los científicos verificar el tamaño y la energía aproximada del impacto único de Carancas en el Altiplano –en la frontera entre Perú y Bolivia– el 15 de septiembre de 2007.

La información sobre las bolas de fuego también desempeñó un papel importante en la historia del pequeño asteroide TC3 en 2008, según lo afirmó Morrison. Ese fue el primer caso de detección astronómica de un asteroide pequeño antes de que impactara el año pasado. Esta información fue clave para localizar el punto de impacto y la subsiguiente recuperación de los fragmentos de este último.

El vínculo en la conscientización pública

Tras años de esfuerzos, los astrónomos se están muy cerca de encontrar la mayoría de los grandes asteroides potencialmente devastadores para la Tierra, aquéllos que podrían causar una devastación regional o mundial. Ahora planean buscar los de menor tamaño.

Entonces, es irónico que la disponibilidad de esta información sobre las bolas de fuego fuera restringida justo cuando el programa NEO se dirije hacia la vigilancia de impactores pequeños, los cuales es más probable que sean registrados en el programa de monitoreo de bolas de fuego, según afirmó Morrison.

“Esta información ha estado disponible para la comunidad científica a lo largo de la última década,” dijo. “Es triste que esta información sea restringida justo cuando se está volviendo más valiosa para la comunidad interesada en caracterizar asteroides próximos a la Tierra y en proteger a nuestro planeta de impactos de asteroides.”

Esta nueva política emitida por la milicia de EE.UU. y en relación con los reportes de observaciones de bolas de fuego desde satélites, también le llamó la atención a Clark Chapman, un científico planetario y experto en impactos de asteroides del Instituto de Investigación Southwest en Boulder, Colorado, Estados Unidos.

“Pienso que es muy importante que esta información se haga pública,” dijo Chapman a SPACE.com.

“Más que el valor científico, creo, lo importante también es que estas inusuales y brillantes bolas de fuego proveen un vínculo en la conscientización pública con respecto al peligro que presenta el impaco de asteroides más grandes y menos frecuentes,” explicó Chapman.

Estos objetos son avistados por personas desprevenidas en lugares remotos, generando a menudo reportes incorrectos y exagerados, según informo Chapman.

“Las conclusiones alcanzadas al asociar estos reportes de observadores inexpertos con las mediciones satelitales son muy útiles para calibrar los reportes de los observadores y cerrar el círculo con personas que piensan que han visto algo misterioso o extraordinario,” dijo Chapman.

Comentario SOTT: Nadie que haya estado siguiendo de cerca la situación geopolítica de la última década, se sorprenderá o se sentirá desconcertado en lo más mínimo al enterarse de que esta información ahora está siendo ocultada del público. Los objetos en el cielo desempañarán un papel más y más importante en los eventos aquí en la Grjan Esfera Azul dentro de los próximos años si nuestras hipótesis aquí en SOTT están cerca de la verdad.

Los amos de nuestro mundo desean crear más “histeria y miedo ante lo desconocido”. Los acontecimientos mundiales están orquestados justamente para provocar este efecto.

¡Qué pena que estos científicos no estén leyendo SOTT!

1 comentarios:

Anónimo dijo...

Joven sobrevive al impacto de un meteorito
http://www.noticias24.com/lifestyle/noticia/2527/joven-sobrevive-el-impacto-de-un-meteorito/