Silencio mediático ocultó agresión biológica de EE.UU. a Cuba

Prensa Latina
24/03/10

Desde los primeros años de la Revolución, Cuba sufrió el impacto negativo económico que provocó la guerra biológica silenciada por los monopolios de la información al servicio de la campaña mediática de Estados Unidos contra la Isla.

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El caso de Cuba como nación pobre, en vías de desarrollo y ubicada a sólo 90 millas del país capitalista más poderoso del mundo, tiene un carácter excepcional y único en la historia del terrorismo internacional y de las estratagemas mediáticas.

Aunque desde 1962 el gobierno estadounidense ha utilizado el ataque biológico como arma silente en la guerra sucia hacia esta nación caribeña, los hechos han permanecidos guardados en un clóset ante la mudez de los grande medios internacionales de difusión.

El 18 de enero de ese mismo año Washington oficializó la modalidad cuando señaló en la tarea 21 del Proyecto Cuba que la Agencia Central de Inteligencia (CIA) crearía un plan para promover fracasos en las cosechas alimentarias en esta nación.

A partir de entonces al menos 10 administraciones estadounidenses han eslabonado una larga cadena de acciones de terrorismo biológico, con sensibles afectaciones a la economía, la salud y la vida de los cubanos.

En 1971 la agresión biológica provocó el sacrificio y destrucción de medio millón de cerdos.

Diez años más tarde, la introducción del dengue hemorrágico en la isla ocasionó 344 mil 203 víctimas y 158 fallecimientos, entre ellos 101 niños.

El 6 de julio de 1982 se registraron 11 mil 400 casos de dengue en un solo día.

La gran mayoría de esas acciones fueron preparadas en La Florida por la extrema derecha de origen cubano, organizada y financiada por la CIA.

En mayo de 1997 la comunidad internacional conoció la denuncia formulada por Cuba ante Naciones Unidas sobre la introducción en el país del Thrips Palmi, diminuto y voraz insecto, depredador de diversos cultivos agrícolas.

La imputación cubana ofrecía detalles acerca de la procedencia, momento y métodos empleados para colocar en territorio nacional el peligroso agente.

El 21 de octubre de 1996 tripulantes de Cubana de Aviación observaron al cruzar sobre el occidental corredor aéreo Girón un avión monomotor que roció de manera intermitente sustancias desconocidas.

Según los registros de control aéreo, en el momento señalado sobrevolaba el corredor Girón en la dirección descrita la aeronave de fumigación modelo S2R, con matrícula N3093M de Estados Unidos, operada por el Departamento de Estado de esa nación.

En diciembre aparecen en la región los primeros indicios de la presencia de una plaga Thrips Palmi en cultivos de papa, en tanto el Laboratorio Central de Cuarentena confirma que el insecto analizado es de origen asiático, hasta ese instante desconocido y ausente en Cuba.

Pero la plaga del Thips Palmi, ya se encontraba diseminada en las provincias de Matanzas y la Habana, en dos municipios de la provincia de Cienfuegos, en algunos de Pinar del Río y en la Isla de la Juventud.

Ese tipo de insecto es muy difícil de controlar mediante insecticidas tradicionales, y resulta un agente biológico ideal para causar graves afectaciones a la base alimentaria agrícola, según las autoridades sanitarias.